Casiodoro de Reina tradujo la Biblia al español, lo que fue, sin lugar a dudas, la mejor traducción castellana de las Escrituras, y Cipriano de Valera la revisó. Fue una labor llevada a cabo por dos extremeños ilustres; por eso la versión se llama Reina-Valera.
España es un país de fuerte tradición cristiana. Sin embargo, esa tradición no se traduce en un gran seguimiento de la fe cristiana de forma práctica en nuestros días.
La fe es «la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.»